El Puerto de Algeciras ha cerrado ejercicio por sexto año consecutivo por encima de los 100 millones de toneladas en un año caracterizado internacionalmente por los desajustes de la cadena logística, la congestión portuaria, el aumento de los fletes e interrupciones del tráfico marítimo como el protagonizado por el Ever Given en el Canal de Suez, eventos que sin embargo «han demostrado la resiliencia y capacidad estratégica del Puerto de Algeciras« que en ese escenario tuvo como gran noticia el inicio de escalas de los megamax de la clase Algeciras de la surcoreana HMM.
Así lo ha afirmado este mediodía el presidente de la Autoridad Portuaria (APBA), Gerardo Landaluce, que ha adelantado el cierre provisional del año: 105´2 (-2%) millones de toneladas de actividad, dato que supone haber movido 1 de cada 5 toneladas que pasan por los puertos españoles. El tráfico de contenedores total cerrará en 4´8 millones de toneladas (-6%), lastrado por el descenso de los transbordos, y compensado por el destacado aumento de los contenedores llenos de importación/exportación, que han alcanzado un nuevo récord con 419.000 teus (+10´5%), siendo el 17% de ellos refrigerados, carga de enorme valor añadido a la que hay que sumar otros 425.000 camiones y remolques (+15%) procedentes del tráfico ro-ro del Estrecho.
Como ha explicado Landaluce, estos crecimientos justifican el esfuerzo que está realizando la APBA en el Proyecto Hércules, que permitirá a corto plazo aumentar en un 50% la capacidad de la Terminal de Tráfico Pesado, la ampliación de las instalaciones del PIF y la trazabilidad completa de la mercancía. Respecto al PIF, ha remarcado que además de más personal, Sanidad Exterior debe incorporar una plataforma digital eficiente que optimice sus procesos operativos.
Ferrocarril
Un apartado especial requiere el tráfico ferroviario, que ha alcanzado cifras récord con casi 200.000 toneladas y 34.490 teus (+64%) en casi 1.000 trenes (+31%), datos en los que no está incluida la actividad desde San Roque Mercancías, que da servicio a las industrias de la Bahía. De esta forma y ante las previsiones de crecimiento y la incorporación de los tráficos que traerá la Autopista Ferroviaria, una de las principales reivindicaciones al Ministerio de Transportes del primer puerto español en volumen de actividad sigue siendo la mejora de su conexión ferroviaria que debe materializarse de forma «irrenunciable» en la mejora del trazado y la doble vía entre Algeciras y Bobadilla/Antequera, de forma que el Ramal Central de los corredores Mediterráneo y Atlántico cumpla con los estándares europeos de los corredores prioritarios de la UE.
En este sentido, el presidente de la institución ha mostrado su preocupación ya que «existe la demanda y la necesidad» pero en las previsiones de ADIF el trazado se mantiene y sólo está previsto el tercer hilo electrificado. En el ámbito hasta donde puede actuar la APBA, el Plan de Empresa de la institución, que supera los 71 millones de euros para 2022, ya recoge una inversión de 19´2 millones de euros en accesibilidad ferroviaria, tanto dentro como fuera del recinto portuario, con proyectos como la duplicación de la vía entre el puerto y San Roque (Guadarranque) o la ampliación de la terminal ferroviaria de Isla Verde Exterior.
En ese déficit de conectividad terrestre Landaluce no ha olvidado las carreteras, con el próximo inicio de obras del Acceso Sur por parte del Ministerio, así como la reivindicación del desdoble del túnel del Acceso Norte, la nueva circunvalación o el desdoble de la 340 Algeciras-Tarifa-Vejer. Por su parte, la APBA acometerá este ejercicio la remodelación de los controles que entroncarán con el Acceso Sur.
Sostenibilidad
En el citado Plan de Empresa la Sostenibilidad tiene un papel protagonista, con casi 7 millones de euros de inversión destinados a materializar multitud de proyectos en los que la APBA ha trabajado en los últimos años y que vienen recogidos en su Estrategia Verde.
Landaluce se ha referido a las acciones que desde hace un año se llevan a cabo en la Playa del Rinconcillo para garantizar su estabilidad «un ejercicio de responsabilidad» sobre el que “seguiremos trabajando con el mismo compromiso y cuyo próximo paso será el visto bueno de la Dirección General de Costas al borrador de convenio de colaboración planteado por la APBA. En este punto ha pedido confianza y tranquilidad porque la APBA tiene preparados planes de acción complementarios para realizar nuevos aportes de arena siempre y cuando fuesen necesarios.
En éste ámbito ha recordado proyectos puerto-ciudad acometidos durante el 2021 como la recuperación del Fuerte de Isla Verde y cuya 3ª fase se ejecutará en 2022; el Paseo Marítimo “Javier Beza” de Puente Mayorga (San Roque); la recuperación ambiental y paisajística del litoral de La Caleta y el edificio de viviendas anexo al Faro de Tarifa; o la redacción de anteproyectos y proyectos del Port Center y Museo del Puerto de Algeciras, el edificio multifuncional y la urbanización de la conexión Llano Amarillo-Avda Virgen del Carmen, dentro del ambicioso proyecto puerto-ciudad del Lago Marítimo, entre otros. La APBA también tiene avanzada la implantación del OPS tanto en Algeciras como en el Puerto de Tarifa, lo que permitirá reducir las emisiones de los buques mientras están atracados en puerto.
ETS
En este punto Gerardo Landaluce ha pedido un sólido posicionamiento país ante la iniciativa de incorporación del transporte marítimo por parte de la Comisión Europea al mercado de emisiones (el denominado ETS) al objeto de que no se materialice en una «fuga de emisiones» a puertos de terceros países a la UE en zonas como el Estrecho de Gibraltar, el Báltico o el Canal de la Mancha.
Así, ha recordado que para ser competitivos los puertos necesitan conectividad, y ésta viene de la mano del transbordo. Sin embargo, «el ETS, tal y como está planteado, nos resta competitividad y nos puede sacar del mercado».
El presidente del puerto algecireño ha explicado que la APBA ya trabaja con Puertos del Estado y otros puertos españoles para que el MITMA (Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana), la Oficina Española de Cambio Climático y la Comisión Europea sean conscientes de que la externalización de transbordos que provocará el ETS «nos hará perder competitividad y empleo, no beneficiará al medio ambiente y creará paraísos fiscales de CO2 en el entorno cercano de la UE».