El sector industrial tiene un papel vertebrador en la economía y actúa como principal inversor privado en las estrategias de Investigación, Desarrollo e innovación (I+D+i) del país. Como recuerda la Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique), la apuesta por la I+D+i es un factor estratégico para la industria química, siendo la capacidad innovadora una de sus principales fortalezas competitivas al liderar la inversión industrial en este apartado. El sector químico acumula el 26,8% de las inversiones que la industria española destina en conjunto a innovación y emplea al 18,6% del personal investigador que trabaja en empresas industriales. Asimismo, el 62,1% de las compañías del sector son empresas innovadoras, el doble que la media industrial (26,3%), lo que determina que sea un sector estratégico, competitivo y con proyección de futuro.
La Química se encuentra en la base de prácticamente todos los avances científicos, tecnológicos e innovadores que permiten el progreso de nuestra sociedad actual. Y su contribución seguirá siendo imprescindible para proporcionar soluciones sostenibles a gran parte de los retos globales gracias a los productos y tecnologías innovadoras que genera.
Es patente la importancia de la inversión en proyectos de I+D+i. Las empresas de la AGI comprenden el papel vital de estas estrategias. La mayoría de nuestras asociadas desarrolla sus inversiones en este capítulo a nivel corporativo o en cooperación con otros centros, por lo que este dato hay que analizarlo a partir de esa perspectiva. No obstante, a lo largo de 2020 (últimos datos publicados) se invirtió más de 1,07 millones en estos proyectos, a lo que se añaden 5,29 millones de euros en el capítulo de gasto, sumando más de 7 millones de euros en total, cantidades en la línea a las ejecutadas el ejercicio anterior.